Omelette cremoso con parmesano

Si algo debes tener en tu repertorio es un receta de un buen omelette, porque es un plato que te facilita la vida, es súper nutritivo y es rápido de hacer. A esto le debemos agregar que les encanta a los niños y es excelente en el desayuno, almuerzo y quizás también en la cena. 

Lo más importante para lograr un resultado perfecto, es usar un súper sartén donde nada se pegue, como el set de sartenes 2.0, que es una versión mejorada con la que podrás lograr resultados de primera en la cocina, pues cuentan con doble capa antiadherente. 

Con esta “artillería pesada” sólo hace falta ponerse manos a la obra, conseguir un bowl, un plato grande y prender el fuego. 

Ingredientes:

3 huevos 

25 gramos de mantequilla fría

Un poco de sal

2 cucharadas de parmesano rallado

Eneldo (para decorar)

Tiempo:
12 minutos

Preparación:

Para comenzar esta receta, te recomendamos colocar los huevos completos en un bowl con un poco de sal. Con la ayuda de un tenedor batimos vigorosamente hasta lograr que la amarilla y la clara se unan muy bien. ¿Cómo sabemos que está listo? Bueno, levantamos el tenedor y si la mezcla cae en forma de hilo, entonces es hora de ir al siguiente paso. 

Prende el fuego medio-alto y coloca tu sartén by Chef James. Una vez haya alcanzado un poco de temperatura, colocamos la mantequilla. La idea es que no llegue a quemarse (a ponerse negra), por eso incorporamos de forma rápida la mezcla de huevo. 

No deberíamos descuidar nuestro sartén. Al poco tiempo se formará una costra en el borde, que podemos ir llevando al centro. Con la ayuda de una espátula redistribuimos la mezcla que aún falta por cocinar. Te quedará más gordito en el centro.

Te voy a dar un secreto para un omelette perfecto. Dependerá de cómo quieras comerte este plato, pero siempre trata de dejarlo menos cocido de cómo lo vas a servir, pues se terminará cocinar con el calor residual. 

Antes de cerrar tu omelette, echa las cucharadas de queso parmesano rallado y comienza a levantar los labios de tu omelette mientras colocas de lado tu sartén. Debe ir enrollándose poco a poco sin mayor ayuda. 

Lleva al plato y adorna con un poco de eneldo, que a mí me gusta porque es una hierba que aromatiza muy bien. Y voilà, a comer un rico omelette.